
Durante el primer Concilio Vaticano Ecuménico (1869-1870), dos sacerdotes tomaron una iniciativa para que los Padres
conciliares lanzaran una llamada a la misericordia en favor de los judíos.
En marzo de 1976, el entonces arzobispo de Cracovia, Karol Wojtyla, fue llamado por san Pablo VI para predicar los Ejercicios Espirituales en el Vaticano. Su contenido fue editado en el libro «Signo de contradicción» por la Universidad Católica de Milán. Reproducimos a continuación algunos pasajes del citado libro.
Es tradición en Roma que los niños se acerquen a la plaza de San Pedro con la figurita del Niño Jesús de su belén para que el Papa se la bendiga; normalmente esto ocurre el tercer domingo de Adviento. El Papa aprovecha para dirigir unas palabras a los más pequeños en las que acostumbra a hacer alguna alusión al belén, a su dimensión artística, catequética y popular.