El pasado 30 de mayo dio comienzo en Roma la Asamblea General de las OMP bajo el lema «Despertar la conciencia de la misión», asamblea que coincide con el primer centenario de la fundación de la Pontificia Unión Misional (PUM), establecida por inspiración del beato padre Paolo Manna para iluminar, inflamar y trabajar organizando a los sacerdotes y, mediante ellos, a todos los fieles en favor de las misiones.
Durante este encuentro, que se prolongó hasta el 4 de junio, el presidente y secretarios generales de las OMP (Obra de la Propagación de la Fe, Obra de la Infancia Misionera, Obra de San Pedro Apóstol y Pontificia Unión Misional) junto con los más de cien directores nacionales se reunieron para reflexionar en torno a cinco puntos: el servicio que las OMP pueden prestar a las Iglesias jóvenes, la naturaleza y misión de la PUM, los desafíos de la pluralidad religiosa y de las preocupantes amenazas del integrismo étnico, religioso y cultural, los contextos de pobreza que desafían periferias, inmigrantes, prófugos, perseguidos y refugiados y los nuevos contextos culturales y pastorales que se refieren al matrimonio y a la familia.
El último día los participantes en la Asamblea, acompañados por el cardenal Filoni, prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, fueron recibidos por el papa Francisco, quien les agradeció su precioso servicio a la misión de la Iglesia, que es el de «llevar el Evangelio a toda criatura». El Santo Padre también les recordó que no son una ONG y que su cometido no puede quedarse únicamente en lo organizativo sino que necesita la «mística» de los santos y los mártires, un verdadero espíritu sobrenatural propio de la pasión evangélica.
Reconocimiento del martirio de los monjes de Tibhirine
Muchos lectores recordarán la película del cineasta francés Xavier Beauvois, estrenada en 2010, De dioses y hombres, en la que se narraba el martirio de los monjes trapenses del monasterio de Tibhirine, también conocido como Nuestra Señora del Atlas, situado...