Tú eres el orgullo de nuestro pueblo
Virgen Santa e Inmaculada, a ti, que eres el orgullo de nuestro pueblo y el amparo maternal de nuestra ciudad, nos acogemos con confianza y amor. Eres toda belleza, María. En ti no hay mancha de pecado. Renueva en nosotros el deseo de ser santos: que en nuestras palabras resplandezca ...