• Portada
  • Historia
  • Hemeroteca
  • Suscripción
  • Redacción
  • Acceso
  • Registro
  • Editorial
  • Artículos
  • Actualidad
    • Actualidad política
    • Actualidad religiosa
  • Secciones
    • Orientaciones bibliográficas
    • Hemos leído
    • Iglesia perseguida
    • Pequeñas lecciones de historia
    • In memoriam
    • 75 años
    • Año de la oración
  • Jubileo del Sagrado Corazón
    • Monumentos dedicados al Sagrado Corazón de Jesús
    • La Devoción al Corazón de Jesús
    • Centenario Consagración de España al Corazón de Jesús
    • Consagración al Corazón de Jesús
CRISTIANDAD
  • Editorial
  • Artículos
  • Actualidad
    • Actualidad política
    • Actualidad religiosa
  • Secciones
    • Orientaciones bibliográficas
    • Hemos leído
    • Iglesia perseguida
    • Pequeñas lecciones de historia
    • In memoriam
    • 75 años
    • Año de la oración
  • Jubileo del Sagrado Corazón
    • Monumentos dedicados al Sagrado Corazón de Jesús
    • La Devoción al Corazón de Jesús
    • Centenario Consagración de España al Corazón de Jesús
    • Consagración al Corazón de Jesús
CRISTIANDAD

Carta de Juan Pablo II sobre el Sagrado Corazón con ocasión del tercer centenario de la muerte de santa Margarita María

Por Gerardo Manresa Presas
junio 2020
en Documentos
3 min de lectura

PublicacionesRelacionadas

«Es preciso que el mundo entero  escuche su testimonio»

«Es preciso que el mundo entero escuche su testimonio»

junio 2020
Acto de consagración de Rusia y Ucrania al Inmaculado Corazón de María*

Acto de consagración de Rusia y Ucrania al Inmaculado Corazón de María*

mayo 2022
La devoción a la Inmaculada Concepción en la historia de España

«Ya no nos duele morir»

enero 2021

El tricentenario de la muerte de santa Margarita María, cano­nizada por mi predecesor Benedicto XV en 1920, reaviva el recuerdo de aquella que, de 1673 a 1675, recibió el favor de las apariciones del Señor Jesús y vio que se le confiaba un mensaje cuya irradiación fue inmensa en la Iglesia. En la octava de la fiesta de Corpus Christi de 1675, en ese gran siglo en que tantos autores y artistas habían penetrado las riquezas del alma humana, la joven visitandina de Paray-le-Monial oye esta palabra turbadora: «He aquí este corazón que tanto ha amado a los hombres y que no ha ahorrado nada hasta agotarse y consumirse para testimoniarles su amor; y en recompensa, no recibo de la mayoría sino ingratitudes».
Durante mi peregrinación en 1986 a la tumba de Margarita María, pedí que, dentro del espíritu de lo que ella transmitió a la Iglesia, se rindiera fielmente culto al Sagrado Corazón. Porque junto al Corazón de Cristo el corazón del hombre aprende a conocer el sentido verdadero y único de su vida y su destino, junto al Corazón de Cristo el corazón del hombre recibe la capacidad de amar.
Santa Margarita María recibió la gracia de amar a través de la cruz. En eso, nos da un mensaje siempre actual. Es necesario, dice «hacernos copias vivientes de nuestro Esposo crucificado, ex­presándolo en nosotros por medio de todas nuestras acciones» (carta del 5 de enero de 1689). Nos invita a contemplar el Corazón de Cristo, es decir a reconocer, en la humanidad del Verbo encarnado, las riquezas infinitas de su amor al Padre y a los hombres. Ahora bien, es el amor de Cristo lo que hace al hombre digno de ser amado. Creado a la imagen y semejanza de Dios, el hombre recibió un corazón ávido de amor y capaz de amar. El amor del Redentor, lo curó de la herida del pecado, lo eleva a la condición de hijo. Con santa Margarita María, unida al Salvador hasta en el sufrimiento ofrecido por amor, pedimos la gracia de reconocer el valor infinito de todo hombre.
Para dar al culto del Sagrado Corazón el lugar que le corresponde en la Iglesia, necesitamos retomar la exhortación de san Pablo: «Tened en vosotros los sentimientos que estuvieron en Cristo Jesús» (Flp 2,5). Todos los relatos evangélicos deben ser releídos en esta perspectiva: cada versículo, meditado con amor, revelará un aspecto del misterio encerrado por los siglos y ahora manifestado a nuestros ojos (cf. Col 1, 26). El Hijo único de Dios, encarnándose, toma un corazón humano. A lo largo de los años que pasa en medio de los hombres, manso y humilde de corazón (Mt 11, 29), revela las riquezas de su vida interior por medio de cada uno de sus gestos, sus miradas, sus palabras, sus silencios. En Cristo Jesús se cumple plenamente el mandamiento del Antiguo Testamento: «amarás al Señor con todo tu corazón» (Dt 6,4). En efecto, solo el Corazón de Cristo ha amado exclusivamente al Padre.
Y he aquí que somos llamados a participar en ese amor y a recibir, por el Espíritu Santo, esta extraordinaria capacidad de amar. Después del encuentro del Resucitado en el camino de Emaús, los discípulos se maravillan: «¿No ardía todo nuestro corazón dentro de nosotros, cuando nos hablaba en el camino, cuando nos explicaba las Escrituras?» (Le 24, 32). Sí, el corazón del hombre arde al contacto del Corazón de Cristo, porque descubre con cuánto amor al Padre el Señor resucitado ha cumplido «lo que anunciaron los profetas» (Lc 24, 25).
Así, la humanidad del Señor Jesús muerto y resucitado se revela a nosotros por medio de la contemplación de su Corazón. Nutrida por la meditación de la Palabra de Dios, la plegaria de adoración nos coloca en una relación más estrecha, más íntima, con ese «Corazón que ha amado tanto a los hombres». Comprendida así, la devoción al Sagrado Corazón favorece la participación activa de los fieles en los tiempos de gracia de la Eucaristía y del sacramento de la Penitencia; en estrecho vínculo con la humanidad de Cristo entregado para la salvación del mundo sacan también el deseo de ser solidarios con todos los que sufren y el coraje de ser testigos de la Buena Nueva.
Aliento a los pastores, las comunidades religiosas y a todos los animadores de las peregrinaciones a Paray-le-Monial para que contribuyan a la extensión del mensaje recibido por santa Margarita María. A tí mismo, pastor de la Iglesia de Autun, y a todos los que se dejen alcanzar por esa enseñanza, les deseo que descubran en el Corazón de Cristo la fuerza del amor, las fuentes de la gracia, la presencia real del Señor en su Iglesia por el don cotidianamente renovado de su cuerpo y de su sangre. A cada uno de vosotros, concedo con gusto mi bendición apostólica.

Etiquetas: El tricentenario de la muerte de santa Margarita MaríaJuan Pablo II y el Sagrado CorazónJubileo extraordianrio de santa Margatira Mª de alacoque
Publicación anterior

El reinado social del Corazón de Jesús (Padre Enrique Ramière)

Siguiente publicación

¡Reconoce, hombre, tu dignidad!

Publicaciones Relacionadas

La misión de san Felipe Neri descrita por el cardenal Newman
Documentos

La misión de san Felipe Neri descrita por el cardenal Newman

septiembre 2022

Felipe nació en Florencia en 1515. Su padre, quien alternaba su profesión liberal con la de notario, mantenía gran amistad con los dominicos. Felipe Neri recibió muchas de sus primeras enseñanzas religiosas de los frailes dominicos del monasterio de...

«Los jóvenes santos nos animan  a volver a nuestro amor primero (cf. Ap 2, 4)»
Documentos

«Los jóvenes santos nos animan a volver a nuestro amor primero (cf. Ap 2, 4)»

abril 2019

El Vaticano publicó el 2 de abril la exhortación apostólica postsinodal Christus vivit (Cristo vive) firmada por el papa Francisco en Loreto, en el santuario mariano de la Santa Casa, el 25 de marzo del presente año. Se trata...

Buscar por fecha…

¡Clama ne cesses!

Últimas publicaciones

Mártires franciscanos de Georgia (USA) en defensa del matrimonio

Mártires franciscanos de Georgia (USA) en defensa del matrimonio

abril 2025

abril 2025
NUEVO NÚMERO – Abril 2025

Tiempos martiriales

abril 2025

Temas

Actualidad Actualidad Política Actualidad Religiosa Apostolado de la oración Cataluña Comunismo Cristiandad, Revista Cristo Rey Editorial España Estados Unidos Eucaristía Europa Familia Filosofía Fragmentos Francia Grabados Historia Iglesia Inglaterra Israel León XIII Liberalismo Mariología Navidad Orlandis i Despuig S.I., Ramón PAPAS (alocuciones, discursos, fragmentos,etc.). Persecución Religiosa Poesía Pío IX, Beato Pío XII Reino de Cristo Religión Rusia Sagrado Corazón de Jesús San Juan XXIII Santa Teresita del Niño Jesús Schola Cordis Iesu Sociología Sociología cristiana Teología de la Historia Varios Vaticano II, Concilio Virgen María

Plura ut unum

Los hermanos Lémann y el Postulatum pro hebraeis

Los hermanos Lémann y el Postulatum pro hebraeis

diciembre 2020
«El programa de la época es la persecución»

«El programa de la época es la persecución»

octubre 2020

El belén, escuela de sencillez

diciembre 2019
  • Aviso legal
  • Política de privacidad
  • Política de cookies
  • Política de contratación
CRISTIANDAD - Al Reino de Cristo por los Corazones de Jesús y María.

Copyright © 2015-2025. CRISTIANDAD. Todos los derechos reservados. Powered by APG.

¡Bienvenido a CRISTIANDAD!

Identifícate con tu cuenta

¿Olvidaste la contraseña? Regístrate

¡Crea una nueva cuenta!

Rellena el siguiente formulario

Rellena todos los campos. Identifícate

Recupera tu contraseña

Por favor, introduce tu nombre de usuario o dirección de correo electrónico para restablecer tu contraseña.

Identifícate
Gestionar consentimiento
Para ofrecer las mejores experiencias, utilizamos tecnologías como las cookies para almacenar y/o acceder a la información del dispositivo. El consentimiento de estas tecnologías nos permitirá procesar datos como el comportamiento de navegación o las identificaciones únicas en este sitio. No consentir o retirar el consentimiento, puede afectar negativamente a ciertas características y funciones.
Funcional Siempre activo
El almacenamiento o acceso técnico es estrictamente necesario para el propósito legítimo de permitir el uso de un servicio específico explícitamente solicitado por el abonado o usuario, o con el único propósito de llevar a cabo la transmisión de una comunicación a través de una red de comunicaciones electrónicas.
Preferencias
El almacenamiento o acceso técnico es necesario para la finalidad legítima de almacenar preferencias no solicitadas por el abonado o usuario.
Estadísticas
El almacenamiento o acceso técnico que es utilizado exclusivamente con fines estadísticos. El almacenamiento o acceso técnico que se utiliza exclusivamente con fines estadísticos anónimos. Sin un requerimiento, el cumplimiento voluntario por parte de tu proveedor de servicios de Internet, o los registros adicionales de un tercero, la información almacenada o recuperada sólo para este propósito no se puede utilizar para identificarte.
Marketing
El almacenamiento o acceso técnico es necesario para crear perfiles de usuario para enviar publicidad, o para rastrear al usuario en una web o en varias web con fines de marketing similares.
Administrar opciones Gestionar los servicios Gestionar {vendor_count} proveedores Leer más sobre estos propósitos
Ver preferencias
{title} {title} {title}
  • Editorial
  • Artículos
  • Actualidad
    • Actualidad política
    • Actualidad religiosa
  • Secciones
    • Orientaciones bibliográficas
    • Hemos leído
    • Iglesia perseguida
    • Pequeñas lecciones de historia
    • In memoriam
    • 75 años
    • Año de la oración
  • Jubileo del Sagrado Corazón
    • Monumentos dedicados al Sagrado Corazón de Jesús
    • La Devoción al Corazón de Jesús
    • Centenario Consagración de España al Corazón de Jesús
    • Consagración al Corazón de Jesús
  • Acceso
  • Regístrate
  • Carrito
¿Seguro que quieres desbloquear esta publicación?
Desbloqueos disponibles : 0
¿Seguro que quieres cancelar la suscripción?