En julio de 1870 Napoleón III, que había declarado la guerra a Prusia, era derrotado en Sedán y hecho prisionero. Se proclama la Tercera República y París se halla sitiado.
A mediados de enero del 1871 el ejército prusiano ocupaba dos terceras partes de Francia y avanzaba victoria tras victoria, arrollando toda resistencia. La situación era tan grave que el ejército francés había tenido que reclutar jóvenes sin experiencia militar de la zona cercana a la línea de fuego.