José de Veuster era un chico despierto, travieso, testarudo y a la vez piadoso. Vivía en el pueblecito belga de Tremelo, en una granja que dirigía diligentemente su madre, una mujer fuerte y generosa, con una fe de gigante; su padre era comerciante de cereal y a menudo debía recorrer los mercados más importantes de Bélgica.
En el sentir de la Iglesia, al compás del Año de la Misericordia, no podemos menos que repasar los grandes apóstoles de la misericordia, y entre ellos destacan los patronos de los hospitales san Juan de Dios y san Camilo de Lelis.
José Benito Cottolengo nació el 3 de mayo de 1786 en Bra, un pueblecito del Piamonte italiano al sur de Turín. Fue el mayor de los doce hijos de Agostino Cottolengo y Benedetta Chiarotti, un matrimonio piadoso que trabajaba en el comercio de tejidos. Ya durante su infancia manifestaba inclinación a atender a los pobres y desvalidos.