Categoría: Artículos

«Salvar la humanidad por la Sagrada Eucaristía» (Emilia Tamisier y los congresos eucarísticos)

Cuando el Señor quiere realizar una obra importante para el bien de los hombres busca siempre almas pequeñas para que se vea que es Él el que actúa y si le dejamos, el plan de Dios llega a ser una realidad. Esto sucedió con un alma humilde como fue la de María Marta Emilia Tamisier

Consagración de las familias al Sagrado Corazón de Jesús

Cuando de niño visitábamos algunas casas por cualquier motivo, con cuánta admiración recuerdo el hecho de que en todas ellas estaba entronizado el Sagrado Corazón de Jesús, bien en las clásicas figuras sedentes en un trono, bien con un marco de un grabado o incluso un calendario con representaciones más o menos afortunadas del divino Corazón.

Tiburcio Arnáiz, apóstol del Corazón de Jesús

Inmensa es la riqueza que nos regala la Iglesia mediante el testimonio de sus beatos y de sus santos. E inmenso es el número de ellos; tanto, que uno puede considerar que no necesita ampliar su conocimiento sobre los que todavía le son desconocidos. Sin embargo, cada vez que conoces a uno de ellos, adviertes el don que supone para cada uno de nosotros.

Consagraciones al Corazón de Jesús

Consagración personal Consiste en que la persona individual se consagra al Corazón de Jesús. Esta consagración es como el fundamento de las otras, porque las demás, aunque no son mera suma de las consagraciones personales de los individuos que forman…

Razón del número

Como es ya habitual en nuestra revista el mes de mayo es dedicado monográficamente a la Virgen María y de este modo nos asociamos a lo que recordaba el beato Pablo VI en su encíclica Mense maio. «En efecto, este…

María, «Madre de la Iglesia»

El pasado 11 de febrero la Congregación para el Culto Divino publicaba un decreto en el que se establecía la memoria de la «bienaventurada Virgen María, Madre de la Iglesia» para ser celebrada el lunes después de Pentecostés. Aunque desde antiguo había sido dado este título a María

María, don de Dios para nuestro tiempo

En el discurso de clausura del Concilio Vaticano II, Paulo VI dijo que en el mundo actual se encontraban la religión del Dios hecho hombre con la religión del hombre que se hace dios. Dos corrientes totalmente antagónicas, no tanto por sus modos de abarcar la realidad temporal, la «ciudad terrena», sino por una actitud más radical.