Cuando el atractivo y mediático Justin Trudeau, líder del Partido Liberal, accedió a la presidencia de Canadá, una de sus medidas iniciales fue intentar restringir los fondos públicos que van a parar a organizaciones que no comulgan con las ideas…
El Concilio sabe que los esposos, al ordenar armoniosamente su vida conyugal, con frecuencia se encuentran impedidos por algunas circunstancias actuales de la vida, y pueden hallarse en situaciones en las que el número de hijos, al menos por cierto…
De nuevo dos aniversarios son el motivo del contenido del presente número. Dos aniversarios de distinta naturaleza, nacimiento y muerte, pero referidos a dos personas unidas por un misma ministerio eclesiástico: obispos, misma dignidad eclesiástica: cardenales, y un mismo lugar…
El 16 de enero de 2018 se cumplen los cien años del nacimiento del cardenal Don Marcelo González Martín, «Don Marcelo», en Villanubla, provincia de Valladolid.
Don Marcelo no fue partidario de homenajes a su persona, y cuando llegaba el día de su cumpleaños, que era el mismo día que la fiesta del santo de su nombre, el único acto extraordinario que hacía y, siendo arzobispo de Toledo, no omitió nunca, era ir a celebrar la misa a los seminaristas y después desayunar con ellos.
La fecha del 16 de enero era una fecha deseada cada año, porque ese día celebrábamos el cumpleaños de Don Marcelo, nuestro cardenal-arzobispo. La cuesta de enero se hacía más llevadera con esta fiestecita y la siguiente de san Ildefonso (23 de enero), patrono de la diócesis, con tonos más solemnes
A lo largo de su vastísimo magisterio, Don Marcelo presenta la devoción al Corazón de Jesús como «síntesis del Evangelio y de la vida cristiana». Con la claridad y la belleza de su lenguaje va desgranando el significado de los elementos característicos de esta devoción: la consagración pública y familiar, la reparación, la realeza de Cristo, la intrínseca vinculación de la misma con el culto eucarístico.
Poco antes del 6 de diciembre, día en que se iba a realizar el referéndum sobre la nueva Constitución española, don Marcelo González, entonces arzobispo de Toledo, tomó la valiente decisión de publicar una pastoral que, como él mismo confiesa, estaba motivada por el deber irrenunciable de orientar las conciencias de los católicos sobre el contenido de aquel texto legislativo.
LA muerte del insigne prelado doctor Marcelo González Martín ha suscitado una corriente muy vasta y profunda de agradecimiento y admiración hacia su persona y su tarea de obispo de la Iglesia católica, que lo fue sucesivamente en Astorga, Barcelona y Toledo, la sede proclamada, en el siglo vii –y confirmada, en el siglo xi, por autoridad pontificia–, primada en España.
El cardenal Don Marcelo durante muchos años presidió la fiesta de la Transverberación de santa Teresa de Jesús en el Carmelo de la Encarnación de Ávila. Quien fue capellán del monasterio desde el año 1966 hasta el final de su ministerio por motivos de enfermedad, don Nicolás González, reunió en un volumen las 27 homilías pronunciadas por Don Marcelo en esa fiesta celebrada el 26 de agosto (cardenal González Martín, Véante mis ojos. Santa Teresa para los cristianos de hoy, Edibesa, Madrid, 2003).
Composición castellana, compuesta y declamada en público, por el seminarista Marcelo González Martín, cuando tenía 17 años (Comillas, 30 de noviembre de 1935).